Sin crimen no hay castigo. La mujer lo admite y la policía detiene tanto a la madre vendedora como a la compradora. Jesusa Molle (30) está arrestada desde que confesó haber vendido a su bebé a cambio de $140.
Molle, al principio fingió que una enfermera le había arrebatado a la recién nacida, en la misma sala de partos, en Cochabamba. Argumento que le sirvió para defenderse de los reclamos y presión de sus familiares. Aunque, la inusual situación no convenció y se inició una investigación policial.
Al final, la incoherente historia de la doméstica indígena, la delató y decidió contar la verdadera, durante el interrogatorio policial. Ella justifica su acción con el hecho de que no puede conservarla, pues el padre de la bebé las abandonó.
También fue detenida Evangelina Suárez (35), la compradora de la niña, que aclara que su incapacidad de tener hijos propios, la llevó a pactar la compra para criarla como su hija.
Vía: RIA Novosti