Los implantes dentales convencionales son típicamente atornilladas en el hueso de mandíbula del paciente, requieren visitas a varios tipos de clínicas, toman dos a seis meses para curarse, y todavía están sujetas a fallos.

No es exactamente una solución ideal para los dientes faltantes. Un profesor de Medicina dental del Centro Médico en la Columbia University, Estados Unidos,  ha ideado una técnica en la que los implantes, podrían ser cultivados en el espacio vacío del diente, justo dentro de la boca del paciente.

El doctor Jeremy Mao comenzó con una especie de andamio en forma de diente, hecho de materiales naturales microcanalizados, estimulado con un factor de crecimiento.

Se trata del crecimiento de una nueva estructura parecida a un diente, sino también en la regeneración de ligamentos periodontal y la formación del nuevo hueso alveolar.

El doctor Mao cree que un diente completo podría ser cultivado en tan sólo nueve semanas.

Antes, tal “crecimiento del diente” habría requerido el uso de células de tallo cosechadas, y tendría que ser hecho en un ambiente externo, como un plato petri.

Creciendo dentro del diente, el implante se integra con el tejido circundante que de otra forma sería imposible. Como es hecho de las propias células del recipiente, se regenerará continuamente y podría durar toda la vida.

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