Debralili Lorenzany trabajaba en el banco desde el 2008, pero a pesar de desempeñar a cabalidad su trabajo, como correspondía, no podía dejar de usar escotes y trajes provocativos.
Por su apariencia, incluso, empezó a recibir comentarios obcenos e inapropiados. Situación que causó el traslado de Lorenzany a otro departamento en el banco, donde la situación fue peor porque llegaron a discriminarla.
Pero como ella continuó vistiendo igual, fue despedida bajo el argumento de que afectaba el desempeño de sus colaboradores varones.
De acuerdo a los voceros del Banco Citibank, la mujer que laboraba como una alta ejecutiva gerencial, constantemente distraía a sus compañeros, con su forma de vestir, por el que ya había recibido llamados de atención.
Luego de su despido, Lorenzany llevó el caso a una corte estatal, por considerarlo injusto y sustenta que atenta contra la igualdad de género. Finalmente, Lorenzany pronto llegará a un acuerdo con Citibank, en una audiencia privada.