Los patrimonios culturales parecen no dejar de ser objetos del tráfico y la clandestinidad, ni aunque se trate de un humano momificado. Autoridades policiales de Bolivia apresaron a una mujer que intentaba enviar una momia al otro lado del mundo en Francia.
El Coronel de la policía, Adolfo Cardenas, dijo este martes que una mujer de nacionalidad peruana pretendía enviar los restos humanos desde la Oficina de correos, ubicado en la ciudad de Desaguadero, que está en plena frontera peruana. El destino de la antigüa momia sería la ciudad francesa de Compiegne.
Para mala suerte de la mujer y buena fortuna de la herencia cultural, la momia fue descubierta durante un control rutinario de paquetes.
Cárdenas aclaró que él no sabe la edad la momia, pero comentó que fue bien conservada y es probable que pertenezca a la cultura incaica. En este caso, se diría que la casualidad salvó a otro tesoro arqueológico de caer en manos de coleccionistas privados europeos.
Fuente/Sottnet