La caminata espacial más larga de la historia de la Estación Espacial Internacional (ISS) resultó en una misión fallida, después de que los dos astronautas a cargo no lograran remover una bomba de frío que se estropeó, tras 8 horas de trabajo en el observatorio espacial.
El fracaso tiene a los ingenieros ahora de cabeza pensando en un nuevo plan para reparar el sistema de refrigeración de la estación, que permite que la ISS no se sobrecaliente. El sistema se echó a perder tras un alza de potencia hace una semana, de modo que la estación está siendo enfriada en este momento por una sola bomba, en lugar de dos.
Por ahora, la tripulación de 6 personas de la ISS no estaría en peligro y las operaciones continúan de forma normal, pero si la bomba que queda llegara a fallar, los astronautas se verían forzados a cortar la energía en casi toda la estación y refugiarse en la sección rusa, que funciona con energía y sistemas de enfriamiento independientes.